¿Cómo crear melodías y riff?


Como hemos visto en uno de los artículos anteriores, el riff es una frase melódica corta que se repite a lo largo de una canción por lo que estos consejos sirven tanto para la creación de riff como para la creación de melodías. No hay solo una forma de hacer riffs si no que vamos a obtener distintos resultados de acuerdo a cómo se utilicen los distintos elementos con los que podemos hacer un riff o melodía.


A continuación una guía con consejos para ¿Cómo crear riffs y melodías? , no son reglas a seguir al pie de la letra sino consejos para usar libremente a la hora de hacer tus canciones.


¿Cómo componer riffs y melodías?

Lo primero que tenemos que pensar es ¿que podemos utilizar para componer riffs, o ideas musicales? Esto nos presenta diferentes posibilidades. De acuerdo, al elemento que utilicemos vamos a obtener distintos resultados, veamos:


Acordes


Algunos recomiendan primero crear una progresión de acordes como base para los riffs, esto es muy útil especialmente sino tenemos por donde empezar, nos permite obtener una armonía y un tono en el cual trabajar.


Generalmente se suelen usar acordes basados en la teoría de los 3 acordes: tónica, subdominante y dominante. Uno de los recursos más utilizados tanto con acordes en quintas como con arpegios, como vimos esta progresión de acordes produce un buen sonido y es usado por la gran mayoría de las canciones populares. Vale remarcar que lo importante es obtener una progresión de acordes o al menos un tono en el cual trabajar. Si ya tenemos una armonía, podemos empezar a partir de nuestra propia progresión de acordes.


Usar acordes en quintas: Este recursos es muy frecuente en el blues , y en el rock and roll, por supuesto con una guitarra eléctrica y distorsión los mismos acordes podemos hacer que suene más metaleros si es lo que estamos buscando. Ej: Green Day – American Idiot o Deep Purple – Smoke on The Water.


Vale destacar que los acordes en quinta son excelentes para crear riff de acompañamiento.


Frases


Luego que tenemos una base donde trabajar hay distintas formas de continuar lo que por supuesto dará distintos resultados y nuestro riff o melodía sonará de distintas maneras.


Se recomienda tocar la progresión de acordes pero esta vez cada nota de cada acorde por separado es decir realizar fraseos basados en las notas de la progresión de acordes con la que trabajamos. Esto sirve para familiarizarnos con las notas que estamos trabajando. Muchas melodías terminan saliendo de aquí.


Podemos hacer fraseos basados en las escalas pentatónicas de la tónica, subdominante y dominante para crear riffs. Este es de los otros de los recursos más utilizados en rock y consiste en hacer frases en la escala pentatónica centrados en las 3 cuerdas más graves de la guitarra (E, A, D).


Mezclar acordes con frases.

Un buen ejemplo es Black in black de Ac/Dc o Led Zeppelin -Whole Lotta Love.


Utilizar fraseos cortos basados en la escala de la tónica. Estos fraseos sirven para unir las distintas figuras entre si como por ejemplo si trabajamos con arpegios o acordes. Debemos recordar que podemos crear melodías basándonos en fraseos sobre escalas como por ejemplo la melodía de “Ode to joy”.

Un recurso frecuente es utilizar la misma frase melódica en distintas partes del trastero.


Arpegios


Es recomendable tocar la progresión de acordes a modo de arpegio. Este recursos también es de los más utilizados para crear riffs o melodías.

Un ejemplo es All out of love – Air Supply.


Arpegios más frases


Donde se juega con un arpegio más las notas de la escala. Un ejemplo de ello es “Sweet child of mine” de los Guns and Roses. También se puede pasar por diferentes arpegios tocando diferentes notas de la escala como en “Paradise City” siempre de Guns and Roses.


Técnica y Ritmo


Consiste en hacer sonar las notas de diferente manera para que las notas no suenen muy simples y las diferentes formas de encadenarlas. Al cambiar el ritmo abrimos una puerta a nuevos riffs. Un detalle es que si el riff se centra en los acordes y arpegios lo más importante es el ritmo, en otras palabras la forma en que hacemos sonar esas notas juntas. En cambio se focaliza en notas como frases la importancia reside en agregar vibrato, tapping, armónicos, ligado, acentuación, y demás técnicas. Un excelente ejemplo de técnica aplicada a la melodía es la canción de “Still got the blues” de Gary Moore.


La suma de los elementos


Para componer una melodía o un riff tenemos distintos elementos como los acordes, los arpegios, las escalas, las técnicas y el ritmo, el resultado final depende de que utilicemos y como lo utilicemos. Esto depende de cada músico y la mejor forma es ir probando y tocar diferentes variantes.


La diferencia entre crear un riff para hard rock y una melodía reside en la intensidad con que se toque. Un buen ejemplo de ello es la canción Numb de Link Park y su versión piano. Lo que queda claro es que la melodía es exactamente la misma, lo que difiere es la distorsión, el instrumento y la claridad con la que las notas suenas.


En otras palabras un riff sirve como melodía porque un riff es una melodía


Si buscamos crear riff para acompañar lo más común es usar acordes en quintas basados en la teoría de los tres acordes. Esto es lo más usado en el blues y en el rock. Si buscamos algo más “armónico” o suave lo conveniente es crear una melodía con arpegios. De todos modos, esto es relativo pues muchas bandas de rock utilizan arpegios con mucha distorsión para generar el efecto opuesto. Y no debemos olvidar que para unir los distintos acordes o arpegios siempre queda bien utilizar algún fraseado con alguna técnica como por ejemplo el ligado.


Cuando tenemos una melodía o riff identificable es hemos logrado un buen trabajo y tenemos una melodía que realmente funciona y pueden ser la semilla de un éxito.


Nos leemos pronto banda, espero esta información sea de utilidad


Dax

Comentarios

Entradas populares de este blog

…Las Emociones… Parte I

… Los Comentarios…